Estoy terminando de leerlo. Y parece que lo he escogido con acierto, pero esto es una falacia. Las lecturas, como las historias según dicen la mayoría de escritores, te eligen. Herejes es la última novela del cubano más internacional (dicen en la editorial). Es la última aventura de Mario Conde, el consigue libros cubano que una vez fue policía y lo dejó porque no pudo soportarlo. Conde, por más que se empeñe y sueñe (cada vez menos) con escribir una novela escuálida y conmovedora, lleva dentro de sí el gen policial, detectivesco, si se quiere. Y los lectores de esta y de todas las orillas, lo agradecemos.
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| Cabeza de Cristo. Rembrandt |
Es esta una obra larga, que enhebra varias historias en lugares y tiempos dispares, todas pivotando en torno a un cuadro, a un boceto más bien, del genial maestro. De Rembrandt: Cabeza de Cristo.
Padura resuelve el misterio, es más, se sirve del misterio para tratar la cuestión del libre albedrío. De la libertad de elegir una religión u otra. Del fanatismo. De la voluntad del ser humano que se sale de la norma y es tachado de hereje. Del significado de la herejía. De la ilusión o la falta de ella. Del futuro o la ausencia de él.
Cuba en 1939, en los años 50, en la primera década del siglo XXI. Amsterdam cuando vivía en la ciudad el pintor que buscaba en los márgenes. Polonia en el siglo XVII, y la terrible matanza de judíos. El Holocausto. El panorama actual (apenas de hace seis o siete años) en la isla.
Y luego, las amistades y amores del Conde, esos tan conmovedores y fieles. Y, por último, por si la actualidad y las circunstancias no me empujaran a admirar el talento narrativo de Padura, la coincidencia. En Herejes de Padura, la película de Blade Runner aparece varias veces; en un momento de la novela hasta le envía una imagen al Conde que le provoca una súbita revelación. En Lágrimas en la lluvia de Rosa Montero (hasta el título lo proclama) este clásico de ciencia ficción tiene un papel absolutamente relevante.
Qué dos novelas tan distintas. Y qué maravillosas las dos. Y sí, he visto cosas que no creeríais... todo desaparecerá como lágrimas en la lluvia...
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